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Cuando te estresas todo tu cuerpo se pone en estado de alerta y por esta razón tu cuerpo debe "recortar gastos" y enfocarse en lo único importante que es mantenerte vivo. El estrés actual es el equivalente a estar escapando de un león, así que ya te imaginarás el impacto que esto tiene en tu cuerpo, su salud, energía y vitalidad, ya no hablemos del estado emocional y mental.
Combatir el estrés puede no ser una tarea tan complicada si de verdad te dedicas a ello y le das la importancia que tiene, desde visualizar un proyecto de vida, hasta saber administrar tu dinero, tiempo y atención, ambas parecen tareas muy complejas pero lo complejo hay que dividirlo en pasos sistematizados y ordenados para que puedas tener logros y te sientas motivado para continuar.
La primera vez que escuché que había grupos para aprender a respirar, me sorprendí tanto porque me llamó mucho la atención cómo es que hemos olvidado hacerlo; generalmente dejamos de hacer lo que muy en el fondo nos parece menos importante y hacemos más lo que creemos que es imprescindible; así que dejar de respirar tal y como el cuerpo lo necesita es una muestra más de cómo estamos desconectados de nosotros mismos.
Aprender a relajarnos debería ser una práctica común pero lo que me encuentro con frecuencia es que no sabemos hacerlo. La relajación implica:
1. Aprender a respirar adecuadamente.
2. Liberar tensión de los músculos del cuerpo.
3. Mejorar la postura, lo cual desacelera todo el sistema nervioso y te ayuda a que seas tú quien mantiene el control sobre tu cuerpo.
De hecho los problemas de sueño se deben a que no se sabe tener control sobre el cuerpo del tal manera que si durante el día le exiges un alto rendimiento, él seguirá su ritmo hasta que no le ordenes lo contrario. La rumiación de las ideas que te mantienen despierto durante la noche son una muestra de que el cuerpo está habituado a estar en estado de alerta.
La buena salud comienza con una buena actitud, pues la actitud es la que te mantiene enfocado y fortalece tu voluntad cuando parece que ya no puedes más.
Así que podemos decir que:
Buena actitud + relajación = buena salud, que es el estado libre de estrés o su manejo adecuado.
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