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Tu pase directo al bienestar

Existen algunas cosas que no sabes acerca tu mente y existen textos antiguos y actuales que explican cómo funcionamos.  Te sientes cómodo con una explicación en específico porque estás listo para eso, cuando la explicación que encontraste ya no te satisface buscas dar un paso más.

Vamos a ver qué tal te sientes con esta explicación: Tú eres Espíritu y utilizas a la mente para crear, la mente en su estado natural es creadora.  Siempre que decides no ser Espíritu pero sí ser un cuerpo (recuerda que no puedes ser ambos porque uno excluye al otro así como la luz deshace a la oscuridad), entonces utilizas a tu mente para percibir, pero la mente que percibe está en un error y por lo tanto cualquier cosa que quieras hacer con ella simplemente se invalida de manera automática y se califica como ilusoria.

Esto es algo muy bueno para ti y para todos porque es precisamente de la mente dual de la que quieres escaparte porque quieres ser feliz y estar en paz pero una mente dual es conflictiva y es imposible que logres tener paz por medio de ella.  Hay algo en ti que recuerda que las cosas pueden ser diferentes, buscas de manera natural tu bienestar porque muy en el fondo sabes que eso es lo que te pertenece, que está bien, que es posible y que es correcto.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Todo lo que no se parezca a un bienestar, ya sea que lo percibas dentro de ti o fuera de ti, es una proyección, una proyección sucede cuando te identificas con el ego, es decir, crees que eres un cuerpo y sientes que algo anda mal, de hecho sólo porque te identificas con el cuerpo es que puedes sentir que algo anda mal, pero eso que sientes que anda mal tan sólo es tu decisión de identificarte con el ego, es como si vieras a través de una lente borrosa, no hay manera de que tengas nitidez y claridad en la imagen a menos que la cambies por una más potente, que en este caso sería tu identificación con el Espíritu.  Siguiendo esta linea, tampoco hay algo que puedas hacer al respecto de cambiar lo que percibes, simplemente no podrás porque no ves con claridad y tu comportamiento será errático así como tu juicio, el ego es como una novela: te quedas picado para el próximo capítulo, te enganchas, no lo puedes soltar y te sientes atrapado ahí; pero así como puedes apagar el televisor, así puedes tener la determinación de dejar de identificarte con el ego y buscar al Espíritu que eres y ser lo que eres.

Si te resuena lo que leíste, si tu alma vibra dentro de ti y quieres saber más, sólo deséalo, sigue tu intuición, quédate atento a las señales y no te detengas porque no hay cosa más segura que tu bienestar total y perfecto.

Por Caanly Hernández Galán

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