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Sensibilidad e intuición

Así como una huella dactilar, cada ser humano tiene características únicas que lo hacen totalmente diferente a los demás, dicho de otra manera cada uno expresa un don divino peculiar o al menos ese es el plan, en el que tu papel es indispensable, si no lo has visto así es porque crees que eso significaría que estarías solo y la diferencia así como la soledad asusta porque nos recuerda ese momento en el que nos separamos de la fuente divina y porque en el fondo queremos sentirnos pertenecientes y alguien diferente difícilmente encontrará una tribu a la cual pertenecer o al menos eso parece.  Esto y muchas cosas más nos indican que como especie aún nos queda mucho que aprender al respecto de las relaciones entre unos y otros.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Los índigo, violeta y cristal poseen una sensibilidad muy fina con la que pueden leer a las personas y a las situaciones, esto es un arma de dos filos porque no tienen filtro con el cual protegerse e interpretar todo de manera que no les afecte ni los desequilibre.  Es decir, son excelentes para reconocer las incongruencias y las mentiras, simplemente lo saben y no lo saben manejar, pero basta con considerar que las personas logramos la congruencia total únicamente cuando nuestra personalidad, alma y espíritu están alineados y sí se puede lograr, los grandes maestros ascendidos nos dieron muestra de ello, pero como podrás darte cuenta eso requiere una disciplina y compromiso que no se ve todos los días.  En este sentido los cristal son más amorosos y pacientes cuando se dan cuenta de esto, pero los índigo y violeta son más intolerantes a este tipo de comportamientos, lo que podría explicar su rebeldía, impaciencia, desequilibrio emocional y hasta les puede generar problemas existenciales difíciles de sanar. 

Una persona intuitiva puede no saber por qué, pero sabe que sabe, la intuición no requiere de comprobación física ni de un razonamiento lógico y es algo inherente al ser humano, no se le considera así porque nuestra sociedad está acostumbrada a creer únicamente en lo que puede ver a pesar de que los grandes adelantos científicos de todo tipo han partido de intuiciones de personas visionarias. Está asociada a la imaginación pero no porque sea falsa sino porque el conocimiento que te llega a través de ella lo puedes obtener por medio de imágenes, de una frase o de sensaciones en el cuerpo como un sobresalto, escalofríos, o bien se siente en el pecho o estómago.

Es una herramienta que vale la pena reconocer y darle al valor que se merece de esa manera la ocuparás con más confianza y seguridad para dar pasos importantes en tu vida.

Por Caanly Hernández Galán

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